El
15 de mazo de 2009, Alejadro Sabella asumía como entrenador de
Estudiantes tras la salida de Leonardo Astrada. Cuatro meses después, el
Pincha sería tetracampeón de América, pondría al Barcelona de rodillas y
sumaría una estrella más. A cinco años, recordarmos su llegada al Club.
Se
cumple un nuevo aniversario de la llegada de Alejandro Sabella como
entrenador de Estudiantes, un hombre que sería uno de los más
importantes en la última decada del club. Fue durante el marco de la 50º
edición de la Copa Libertadores de América y el Pincha venía de caer en
Ecuador ante Deportivo Quito.
Por
entonces, Leonardo Astrada era el entrenador albirrojo durante esa
temporada y tras la derrota ajustada por 1-0 ante el conjunto
ecuatoriano, dejó la conducción técnica. Tras su salida, surgieron
varios nombres como Nery Pumpido, Américo Gallego, Fernando Gamboa pero
Alejandro Sabella fue el elegido para suceder al Negro Astrada.
Sabella
no contaba con experiencia como entrenador, había sido ayudante de
campo de Daniel Pasarella en River y en la Selección Argentina. Aunque
su paso como jugador pincharrata había dejado un buen recuerdo y los
antecedentes de técnico jóvenes -Simeone, Sensini- fueron los avales
para que sea el conductor del nuevo ciclo, junto con Julián Camino,
Claudio Gugnali y el profe Pablo Blanco.
El sagas e inteligente entrenador tuvo un debut ideal en Copa: 4-0 frente a Deportivo Quito en La Plata y Estudiantes finalizaría segundo en el Grupo 5. Luego continuó con un andar arrollador para consagrarse campeón de América en Brasil apenas cuatro meses del arribo de Pachorra. Dicho palmar, le permitió al Albirrojo disputar el Mundial de Clubes ante el Barcelona de Guadiola y Messi, a quienes puso de rodillas pero cayó en tiempo suplementario.
Pero amén de estas proezas, Sabella y su cuerpo técnico le dieron identidad al equipo, que desde la era Simeone no había tenido. Y el último campeonato logrado por el Pincha fue bajo su mando: el Clausura 2010 en Quilmes. Apenas dos meses después, el entrenador se marchó en silencio de la conducción técnica y hasta el día de hoy, Alejandro prefiere el silencio.
Mucho se habló de que su salida se debió a la disconformidad con la dirigencia que encabezaba Ruben Filipas. Aunque Pachorra siempre mostró respeto hacia la familia pincharrata. El tiempo le dio otra oportunidad como entrenador, dirigiendo a la Selección Argentina a la cúal llevó a la final de la Copa del Mundo en Brasil luego de 24 años.
Alejandro Sabella será siempre recordado, no sólo por los títulos obtenidos sino por los valores que transmitió y por su forma de ser: es una persona respetuosa, humilde, que siempre estuvo ajena a las polémicas. Es por eso, que más de un hincha de Estudiantes, sueña con su regreso, aún con el paso de los años.