Estudiantes perdió categóricamente en su visita a Colombia. Atlético Nacional le metió 4 sin despeinarse. Muy poca actitud por parte de los de Nelson Vivas.

El Pincha cayó derrotado frente al último campeón de la Copa por 4-1. A pesar de un buen comienzo, el local fue ampliamente efectivo y comprendió dónde estaba el partido para tomar las ventajas. El “León” fue un equipo carente de actitud, ideas y de resolución en los momentos claves del juego. Ahora, dependerá de muchos resultados y posibilidades para poder meterse en la siguiente ronda o en la Copa Sudamericana.

Un buen comienzo motivó a los hinchas. A los 2 minutos Javier Iritier apareció por la banda derecha para enganchar y definir de zurda. Franco Armani, arquero de Nacional, estaba vencido, pero el tiro se fue ancho. 3 minutos más tarde otra oportunidad, esta vez por las alturas. Leandro Desábato ganó para bajarla y casi le cae a Lucas Viatri, que ya se relamía para poner la ventaja.

No pasó mucho más hasta los 20, que fue el momento donde Atlético Nacional tomó la iniciativa. Creció la figura de Quiñones, la figura de la cancha, que se fue por derecha por primera vez y remató fuerte al primer palo para encontrarse con Mariano Andújar. A los 32, otro aviso, Bocanegra probó desde muy lejos sorprendiendo a todos y de casualidad no clavó un golazo.

35 minutos de partido y apareció el primer gol. Quiñones por derecha de nuevo, pase atrás para Uribe, que vió que nadie le salía y se tuvo fe. Remate fuerte abajo para que Andújar no pueda hacer nada, ya que se encontraba muy tapado. Automáticamente casi lo empata Estudiantes. Bautista Cascini por poquito no encontró el arco tras un pase muy bueno de Lucas Rodríguez.

Antes del final de la primera parte, donde Juan Sebastián Verón fue de lo mejor por su claridad para tocar y distribuir la pelota, otra vez Quiñones desbordó a gusto. Se comió a Sebastián Dubarbier tan pegado a la línea que parecía que la pelota se había ido, centro atrás, y definición magistral de Moreno. Así terminó el primer tiempo, con dos golpes al mentón y un millón de dudas.

Para colmo, en la primera pelota del segundo tiempo, desborde por derecha con centro al segundo palo para el gol de Ibarguen. ¿Quién desbordo? Quiñones. ¿Por dónde? Por la banda de Dubarbier. Una constante del partido que en ese momento se ponía 3-0 para el local. A partir de allí no hubo partido. Aprecieron los cambios, que fueron bastante previsibles: Juan Cavallaro por Lucas Rodríguez, Javier Toledo por Lucas Viatri, y Santiago Ascacibar por Juan Sebastián Verón, que minutos antes de irse estrelló un tiro libre bárbaro en el travesaño.

Pasados los 20 minutos del complemento Estudiantes logró descontar. El que se pudo escapar fue Dubarbier, que tiró un buscapié que encontró el botín de Farid Díaz. El lateral de la selección, de esta manera, anotó el 3-1 temporal. La ilusión de una posible remontada duró menos de 5 minutos. Jugada calcada al resto de los goles, pero esta vez con definición categórica de Macnelly Torres, que le rompió el arco a Andújar.


Caída dolorosa, tercera en la competencia. Teniendo en cuenta la victoria parcial de Barcelona sobre Botafogo, el Pincha deberá ganar en Ecuador, y esperar que entre Nacional y el equipo brasilero no haya ventajas (o una victoria de los colombianos). En la última fecha, tendrá la chance de clasificarse derrotando a Botafogo y esperando un triunfo de Barcelona, empate, o victoria de Nacional por pocos goles, ya que tiene una ventaja muy superior: obligaría a Estudiantes a anotar muchos goles frente al equipo brasileño.
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