Estudiantes quedó eliminado. Perdió con Belgrano 2-0 y es momento de analizar que se hizo mal. En menos de dos meses de competencia, sólo sigue vivo en un frente de los tres.

El Pincha perdió su chance copera. Cayó derrotado en Córdoba con Belgrano, que le golpeó primero los tobillos y luego el corazón, superándolo con un equipo totalmente inferior y carente de juego. Una sorpresa ya que Estudiantes estaba obligado a ganar la llave por historia, actualidad, equipo, e individualidades. Un semestre para olvidar rápidamente. Lamentablemente, se terminó todo muy rápido.

En un primer tiempo aburrido, lo poco que hubo para destacar fue una durísima plancha de Federico Lértola sobre Lucas Viatri, que según el árbitro no fue merecedora ni de amarilla. Una clara falta de expulsión, que condicionó el resto del trámite. Además de eso, sus compañeros también abusaron del juego brusco: más que nada sobre Carlos Auzqui, que con picardía logró amonestar a Lema y Álvarez Suárez.

La única acción de peligro fue fruto de la lucha de Santiago Ascacibar. Peleó con todo lo que se le cruzó por la banda izquierda en un contragolpe y dejó mano a mano a Solari con el arquero, que definió muy por arriba. El Pincha se iba al descanso con una sensación de mejoría.

El comienzo del segundo tiempo fue positivo. La primera la tuvo Auzqui, que sorprendió por izquierda y remató de zurda cruzado para que Olave se luzca. Más tarde el arquero se convertiría en la figura. A los 10 minutos Estudiantes coordinó una jugada exquisita para que Julián Marchioni llegue como número 9 a rematar fuerte. Olave atajó con autoridad, y también detuvo el rebote que envió Lucas Viatri.

A los 20 minutos ocurrió la catástrofe. Luego de un remate al arco, Solari puso las manos donde no debía y regaló un penal para que Belgrano se ponga arriba. Claudio Bieler superó a Andújar y puso el 1-0. Como si fuera poco, 2 minutos después, un lateral cayó en el área haciendo dudar a Facundo Sánchez, que no la sacó y se la dejó servida a Bieler. El delantero remató fuerte abajo. Nada pudo hacer el gran Andújar.

Con el 2-0 llegaron los cambios desesperados. Ignacio Bailone por Julián Marchioni y Lucas Rodríguez por Lucas Viatri. Poco pudieron hacer los ingresados. La última fue para los de Vivas. Luego de un corner de Cavallaro que peinó Schunke, apareció Aguirregaray solo que le erró al arco. Con ese gol el “León” hubiese clasificado.

Antes de la jugada final, Lucas Aveldaño le pegó un codazo de mala leche a Ascacibar dentro del área, pero como la pelota no estaba en juego no fue penal. Fue expulsado y luego del partido declaró: “No le hago nada”. Vergonzoso.

Estudiantes fue superado y no supo como encarar la recuperación. Una lástima, pero el semestre se terminó muy rápido. El objetivo rápidamente será permanecer entre los primeros del torneo local desde aquí hasta el receso, teniendo en cuenta que el año que viene habrá Copa Libertadores. La Copa Sudamericana, claramente no es lo del Pincha.



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